Entre abanicos (II) : Las vitrinas de mi madre y algunos abanicos de familia y amigas

Los abanicos de mi madre, Josefina, nos acompañaron mudanza tras mudanza, de casa en casa y de ciudad en ciudad. Fue en la última casa, donde pasó el mayor tiempo de su vida, primero casada y después viuda, donde decidió encargar unas vitrinas para que los abanicos pudieran lucirse y preservarse. Son esas dos vitrinas que encabezan la entrada y que podeís ver en la foto en la que está junto a cuatro de mis hermanas y las vitrinas detrás.

Los abanicos de mi madre tenían no sólo un valor económico sino también sentimental aunque no sé precisar quién se los regaló o dónde los fue adquiriendo. La mayoría de ellos tenían varillas de nácar, otros de marfil. El país, era de encaje en muchos de ellos. Siento no disponer de fotos de mayor calidad e individualizadas.

En "Creciendo entre Flores" ya había dedicado en su día una entrada a los abanicos.

https://creciendoentreflores.wordpress.com/2015/09/06/entre-abanicos/

Hoy los traigo de nuevo aquí para dar visibilidad a algunos abanicos de amigas




Rescaté esta otra foto del baúl de los recuerdos que aunque no es de muy buena calidad, muestra una de las vitrinas.


A la muerte de mi madre, al vender la casa, se hicieron lotes con todo lo que había en la casa y las vitrinas correspondieron a una de mis hermanas y a mi hermano respectivamente. No tengo ninguno de esos abanicos.
Siempre me han resultado atractivos los abanicos y me hubiera gustado haberme quedado con uno de recuerdo pero optamos por no deshacer las vitrinas y que permanecieran como estaban. La verdad es que podíamos haber repartido los abanicos entre tod@s.

Cuando somos jóvenes, no damos valor o no prestamos atención a muchas cosas. Se ve que al hacernos mayores, quedar huérfanos y haber perdido nuestras referencias, nos viene la nostalgia. Es por ello que pensé en darles vida a estos abanicos y compartirlos con los de familiares y amigas. Lástima no haberle hecho más preguntas a mi madre sobre este pequeño legado que nos dejó.
Mañana cumpliría años y hubiera sido bonito poder celebrarlo con ella con esta presentación.

NOTA : Las fotos de los abanicos correspondientes a cada una de las colaboradoras, las he colgado en el orden que las he ido recibiendo.

De Elena L

El primero se lo regaló su prima Mª Carmen






De Francesca

Me comenta que muchos de ellos son de un coleccionable. Otros se los han ido regalando y también hay algunos publicitarios.
Refiere que entre la gran variedad que tiene, unos tienen el país de tela, otros de papel; hay uno de corcho y también varían las varillas, siendo algunas de bambú.



































De corcho


Pai pai



De estilo kits




Recuerdo de una boda


De la Feria de Almería





Publicitarios





De Ramona











De madera de peral


Comprado en La Feria de Artesanía de Castilla la Mancha (FARCAMA)




Con estuche para guardar una vez plegado






De mi hermana Mª José


Abanicos de bolillos de un grupo de Facebook de mi amiga Mila

Realizado por Patro Jurado


Realizado por Juliana Balconada


Realizado por Reyes Jiménez Cuevas


Realizado por Manuela López


Los de Puri, amiga de Ramona

Entre las curiosidades de Puri está el hecho de que se inició en el coleccionismo de abanicos en  la Feria de Artesanía de Castilla la Mancha (FARCAMA). Estableció contactos con unos artesanos de Aldaia (Valencia), Abanis. Suele adquirir ella el varillaje y el país y luego los manda montar a ellos.

Una preciosa colección de abanicos con varilla de hueso y de ébano y en el país algunas pinturas conocidas como esta de "El Columpio" de Jean-Honoré Fragonard


Varillaje de hueso y en el país representada a óleo a mano el cuadro del pintor Fragonard


Maravilloso también el reverso del abanico


Anverso y reverso. Varillaje de ébano, pintado a mano



Varillaje de ébano, país de encaje, pintado a mano


Varillaje de palo santo, país de encaje y pintado a mano


Abanico antiguo. Varillaje de hueso. Comprado en anticuario


Varillaje de nácar. Pendiente de poner país.Comprado en anticuario.


Empresa familiar de Aldaia. Al parecer cerró al morir el matrimonio que lo llevaba pero parece que una hija conrtinúa haciendo algunos trabajos.


Los de Tere





Míos

Siento no encontrar uno de los abanicos que para mi guarda un valor sentimental. Se trata del que me regaló Virtudes, la mujer de un paciente. Fue a propósito del calor que pasábamos en la Sala de Terapia de Grupo Familiar. Se trataba de una sala más pequeña que la podéis ver en la foto. El abanico de Virtudes es el floreado que está a la izquierda del de flor de Ginkgo.

Fotos de mi despacho donde se pueden ver los abanicos en la repisa inferior a la izquierda

Cuando desmonté el despacho, al jubilarme, no recuerdo dónde lo guardé


Abanico de Ginkgo biloba 

Es el único que compré de un coleccionable.


Abanico de mi madre que resume algunas de las Jornadas de la Juventud con el Papa en diferentes ciudades del mundo y años


Artespaña


Veo que este se repite en algunas otras colaboradoras.


Abanico como detalle de la boda de un sobrino, confeccionado a mano por la madre de la novia.


Escultura decorativa, mujer oriental con abanico


Tiendas de abanicos

Cuando estuve en Valencia el pasado mes de diciembre, me llamaron mucho la atención algunas tiendas de abanicos. He hecho una búsqueda y colgado algunos de los abanicos de dos de sus establecimientos.

 Carbonell









Vivenca





Un clásico en Madrid en la Puerta del Sol, Casa de Diego






Tiendas de Museos

Tienda del Museo del Prado




Tienda de la Casa Museo Sorolla



Abanicos tienda del Museo Thyssen de Madrid

De Daniela Beizaga


Balenciaga


De Van Gogh


María Moninckx


De Isabel Quintanilla




Museo del abanico, Aldaia (Valencia)








Museo en Évora (Portugal)

Museu Nacional Frei Manuel de Cenáculo


Libros



Muchas Gracias, Elena, Francesca, Ramona, Mª José, Grupo Bolillos y Puri por compartir vuestros abanicos.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Huerto (L) : The Victory gardens, los jardines de la Victoria

El despertar de las orquídeas (II)

Flores pasadas de moda (II) : Esos pañuelos que ya no se llevan

Lecturas (CIV) : Los libros en los que aprendimos

Lo que heredamos : Bordando flores (II)

Artesanía con Flores (VI) : Danza en altura entre flores

Viajando sin ir muy lejos (CCXX) : La Casa de Tomasa en La Puebla de Montalbán

A la mesa entre Flores (I)

Cosiendo entre flores (V) : La silla de costura