Lecturas (CXXXVIII) : La mujer de enfrente
Descubro por azar esta obra de Carmen Camacho, "La mujer de enfrente", que me enlaza irremediablemente con la entrada que dediqué a la ropa tendida y en la que tantas amigas colaboraron compartiendo sus tendederos como si de una exposición de artes plásticas se tratara.
https://disfrutandoentreflores.blogspot.com/2024/02/tendiendo-al-viento.html
Un cordel en un patio de luz es un cordel en un patio de luz. Pero, bien mirado y ejercido con primor el magisterio de la colada, es la Creación microcósmica de una diosa, la creación efímera de una artista y la recreación semiótica de la vida en un barrio de clase trabajadora en una ciudad de Andalucía. Esta es la obra, cotidiana y nunca valorada, de la mujer de enfrente, quienquiera que sea. Carmen Camacho contempla la ropa tendida, y se deja decir: cuenta lo que el tendedero, cada vez, le cuenta. Las prendas tendidas al sol y al aire, con gracia natural y una belleza extraña, se convierten para la autora en un guiño, señal o mensaje cifrado. Cada colada es un estado de ánimo, un espejo, una luz encendida, un fragmento de barrio, un instante de mundo. Estas visiones conducen a Camacho, a veces, a la revisión mítica de la Magna Dea; a veces, a pensar (con esa manera otra de pensar que es la poesía) en tantas mujeres que son la mujer de enfrente, vecinas-cariátides encargadas en exclusiva de la crianza de hijos y nietas, la compra, la limpieza, los cuidados; y otras veces a explorar las propias heridas, abiertas de pronto ante una camisa o un peluche que se secan al sol.
Ilustración del poema "De lavar y guardar la bata" por Pepe Benavent
https://www.macleinyparker.com/tienda/libros/clematide/la-mujer-de-enfrente/
La mujer de enfrente propone junto a su galería de mujeres atlantes un retrato de la vivienda como un contenedor de recuerdos y experiencias, una memoria sentimental.
https://amarandaalvea.wordpress.com/2024/01/09/la-mujer-de-enfrente-de-carmen-camacho/
Me encanta! Qué idea tan sencilla y a la vez original. Gracias, M. Ángeles por compartirlo. Y ahora mismo voy a buscar esa entrada de la ropa tendida
ResponderEliminarA mí me ha parecido un acierto la elección del tema y el hecho de que sea ilustrado. Siempre me he sentido atraída por los tendales y las azoteas.
ResponderEliminarComo dice mi amiga Francesca "la mujer de enfrente somos todas".
Gracias, Sol, por comentar.
Aprovecho para desearte lo mejor para el 2025.