Viajando sin ir muy lejos (CLX) : Asturias (XI) : Oviedo, amable y acogedor

No está mal para comenzar introducir esta imagen del Monumento a la Concordia. Es un monumento que está ubicado en un parterre en la Plaza del Carbayón, frente al Teatro Campoamor, el lugar donde se hace entrega anualmente de los premios Princesa de Asturias.

Esta plaza ha tenido varios nombres pero al final se optó por dejarla definitivamente con el de Plaza del Carbayón en honor a un singular roble que derribaron para hacer la ampliación de la Calle Uría.

"Cayó el negrillo, pero el Carbayón no caerá tan fácilmente: es el árbol secular y sagrado de la ciudad, testigo de todos los acontecimientos de nuestra historia, que, a más vivir con la savia de esta madre tierra, parece que vive con la savia de recuerdos antiguos y de nuestro cariño. Allí está; al extremo del Campo, tocando el pueblo de quien es patrono.» Fermín Canella

https://el.tesorodeoviedo.es/index.php?title=Carbay%C3%B3n_de_Oviedo

Calle Uría


https://el.tesorodeoviedo.es/index.php?title=Calle_Ur%C3%ADa

Plaza de la Fontán

En los inicios de la ciudad de Oviedo, esta zona era una laguna natural a las afueras de la ciudad, lo que la convirtió rápidamente en una zona de recreo de los nobles ovetenses. Los campesinos, que vivían en las afueras de la ciudad, se acercaban hasta este lugar a vender sus productos (leche, verduras, quesos, gallinas, etc.); esto hizo que no tardaran en aparecer los artesanos como herreros, cesteros, etc. Y fue así como surgió uno de los mercados más antiguos que se recuerdan en la ciudad. 

El 11 de junio de 1792 el Ayuntamiento acomete la reforma de la plaza del Fontán. Pretende dejar la plaza como un lugar rectangular, abierto por cuatro entradas y con cuarenta casillas. Con el tiempo los almacenes de las tiendas se fueron convirtiendo en viviendas de inquilinos y varios edificios sufrieron modificaciones a lo largo del siglo XIX, aunque eso no hizo que la plaza del Fontán perdiese el espíritu con el que fue concebida inicialmente.

Debido a su deterioro, en 1996 el Ayuntamiento dispuso su demolición y posterior reconstrucción. Inaugurándose la nueva plaza del Fontán en 1999.

Mercado de abastos "El Fontán"


https://asturias.com/mercado-de-el-fontan/

Algunas casas con arquitectura florida


La Catedral




Otras


Algunos árboles

- Tulípero de Virginia


- Manzano silvestre


Árbol de Júpiter en el Campo de San Francisco


Algunos balcones floridos

- pequeño jardín vertical en un ático 




Calle Argüelles



Algunos detalles floridos en comercios


Oviedo en la poesía


Algunos comercios de interés

- Tierra Astur



https://tierra-astur.com/tierra-astur-gascona/

Floristerías

Son muchas las Floristerías repartidas por la ciudad. Dedicaré una entrada especialmente a esta en particular : "Materia Botánica" de Dani Pando.


https://www.creoenoviedo.com/negocio/materia-botanica

La Foncalada
Este monumento, testigo único de la arquitectura hidráulica del Alto Medievo europeo, es el elemento peor conocido de la herencia arquitectónica del reino de Asturias. La primera mención documental data de fines del siglo XI (1096), donde se recoge su presencia como un destacado hito topográfico.

El propio monumento estuvo profusamente recorrido por inscripciones, de las que sólo resulta legible la principal, situada en la fachada del templete. El análisis de los rasgos de las letras de esta inscripción, muy semejantes a las de la inscripción de San Tirso de Oviedo, permite proponer como fecha probable de su construcción la primera mitad del siglo IX.

En su descripción distinguiremos los tres elementos constitutivos del monumento: estanque, edículo y canal, tal y como han sido descubiertos en las excavaciones llevadas a cabo en la década de 1990, que han permitido devolver al edificio toda su grandiosa monumentalidad.

El estanque se compone de una plataforma de enormes bloques calizos, cuidadosamente yuxtapuestos, delimitada lateralmente por dos alineaciones murarias. La anchura interior es de cuatro metros; la longitud total no ha podido determinarse, pero supera los catorce metros en lo actualmente despejado. Para acceder al interior fueron dispuestas dos escaleras junto a la fachada principal del templete.

El edículo o templete es una construcción trapecial en planta, de unos 4x3 metros, y una altura ligeramente superior a los 4 metros. El aparejo es de sillería, de módulo alargado, con juntas muy finas de mortero calizo. En las fachadas Oeste y Este se dibujan dos arcos adovelados en piedra, de medio punto, de rosca única. En la fachada Este el arco se prolonga al interior como bóveda que recubre una cámara interior, de 2'50 metros de altura máxima.

El canal de alimentación ha sido exhumado sólo en muy pequeña parte. Está formado por una gran caja de bloques calizos, casi ciclópeos, que se entronca en la fachada posterior del edículo. La relación constructiva y la uniformidad de las cotas del camarín interior del templete con la del interior del canal indican con claridad que se trata de obras simultáneas.

No se conoce la procedencia de las aguas, ni tampoco se ha podido determinar si se trata de un afloramiento cercano o de una recogida y encauzamiento de un caudal de lejano origen


Es la única construcción civil con fines de utilidad pública del arte asturiano que se conserva. Fue mandada construir por Alfonso III en el lugar, cercano a la muralla, donde se encontraba un manantial de agua potable. De planta rectangular de 4 metros de ancho con forma de templete y un arco central de medio punto. Construida con piedra de sillería de arenisca, está rematada con un frontón triangular en cuyo vértice existe una cruz asturiana de la Victoria.

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